Gimnasia
y Tiro, a su vez, no encontró
mejor argumento que presionar con una amenaza a la Federación Salteña de Básquetbol, que le había suspendido un
jugador. ¿Un escrache, una sentada?, no; en esos tiempos no se usaban esas
cosas, pero existían otros recursos. Gimnasia dijo que “si no le levantaban la
suspensión al sancionado, se retiraba del torneo por falta de jugadores. El
presidente de la Federación ,
que a su vez era de Gimnasia y Tiro, expresó con firmeza: “pertenezco a
Gimnasia y conozco bien a fondo el problema; desgraciadamente no es el club el
problema, sino el hombre”. El crack “siguió purgando la sanción, mientras que
los “empuadores” se retiraron discretamente, dejándolo al suspendido en la
estacada”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario